Llegada al África

El 20 de diceimbre de 2006 llegué al continente africano. Después de 16 horas combinadas entre el autocar y el ferry, Tánger fué mi primer contacto con Marruecos. Un puerto enorme, caótico, flujo de gente que regresaba de España a su tierra natal.

Cambio de autocar.
La espera para sacar la maleta. Rodeado de gente que camina de un lado a otro, gritos, no entiendo nada. Los vendedores de thé se mezclan en el alboroto que es el puerto de Tánger. De pronto me encuentro con Hajar, se dirige a Rabat, la capital del país, tiene escasos 20 años. Hajar vuelve a casa despues de estdiar un año en España, visitará a su familia un par de semanas y regresará a Europa a terminar sus estudios de Topografía.

Ya metido en el nuevo autocar, mer esperan 12 horas más de viaje, para llegar a mi destino final, Marrakech. Comparto 5 horas con Hajar. Demuestra cierta rebeldía a las costumbres árabes, normalmente tiene prohibido fumar, pero a ella le gusta, nos conocimos gracias a un cigarrilo. Su forma de vestir está ya "occidentalizada" totalmente a la moda, lo que no cambiará son esos rasgos, esos ojos característicos, tan bellos y expresivos, esa mirada profunda...

El segundo contacto visual.
Tánger me recuerda a La Habana, aceras grandes, cruzamos por la perifería rumbo a la capital, los paisajes que acompañan el viaje son campos de trigo, que se están preparando para iniciar un proceso que terminará conla cosecha. Hajar me demuestra una gran alegría de volver a casa. El autocar se detiene y nos despedimos.

De nueva cuenta solo, aprovecho las últimas horas de luz y retomo Estrella distante, Romero sigue en la pista de Carlos Wieder.

El camino parece interminable, innumerables paradas, Marrakech cada vez más cerca, pero el diminuto espacio entre los asientos hacen el viaje incomodísimo, 32 horas después de mi salida desde Valencia, el trayecto llega a su fin, las piernas entumecidas, pocas horas de sueño se conjuntan en un viaje para el olvido (paradójicamente será inolvidable).

Marrakech me recibe en silencio al filo de la una de la mañana, comienza el día 21 del mes 12 de 2006. El cielo plagado de estrellas, estrellas distantes enmarcadas en el negro de la noche.