Llegaron los 24...

21-22 octubre 2006, Paris

Así es, ha cambiado un número más en el calendario y con ello se suma un numerito a mi edad, 24, no me preocupa (el número) afortunadamente no tengo ese problema de sentirme viejo, en ésta ocasion tampoco me vino la pregunta, qué voy a hacer de mi vida, o sea que no había elementos para deprimirme jajajajaja.

Frío y un poco de lluvia del otoño francés, mucho frío, bueno al menos yo tenía mucho frío. Desperté alrededor de las 2 de la tarde, hay que comprar cosas para desayunar. No mamen, les digo a mis compañeros, yo no voy es mi cumpleaños. Neeel, voladito, responden ellos.

El que salga disparejo va a hacer las compras. Euro, euro, euro y tú Osvaldo?

No mamen, puta madre a ver denme la lista, en el camino pienso - chale que pitos ando yendo yo al super por un simple juego de azar, a parte es mu cumpleaños, debería estar en cama aún y esperando a que regresara del super alguno de mis compas. Luego pienso, creo que es el 1er cumpleaños que tengo fuera de casa... Mmmm, no, en 99 no vivía en mi casa,en 2000 fue en Oaxtepec; en 2001, en un autobus de Pochutla al DF; en 2002, en el Estadio de los Pumas; el 2003, creo que si lo festejé en casa, al igual que 2004, el más reciente en Coyoacán y bueno este año en Paris.

Hijole, solo un par fueron festejos, será que no me gusta celebrar mi cumpleaños???, suele ser así, recuerdo que hace años sí sentía algo de emoción por festejar, pero al final ya no, de pronto me siento incómodo con la gente que te felicita y de ta un abrazo. Cómo por qué. No lo se.

Bueno el 2006 el festejo comenzó en la vispera y "mi día" comenzó con un vaso de vino en la mano, un cigarrillo y el viento otoñal. Después de algunas horas de sueño, me encontraba ahi saliendo del super con huevos, leche, salchichón, queso y algo más que no recuerdo, ah si jitomates, claro y 15 euros menos en el bolsillo.

Pasó el desayuno, que cabe aclarar que termino alrededor de las 4 de la tarde y con la firme convicción, una vez más, de hacer el intento de levantarnos más temprano y cuando digo más temprano es a eso de las 10 am.

Amélie, va al super, regresa, mete saca muele, licúa (con un aparato,que no es una licuadora, acá no hay licuadoras), huevos, harina, chocolate, mmm chocolate. Se prepara un pastel para el festejado.

Dan las 8 de la noche , la transición fue picarme el ojo, ver televisión, escuchar conversaciones en inglés, francés y español de las que no formaba parte. Retraido en el cannapé negro, alejado de todos dentro de la casa, y con frío.

A las 22h00 una cena muy francesa, canard à l'ognion, papas, si más papas, ensalada, pure de manzana, cafe y un delicioso pastel de chocolate.

Tengo que aclarar que no pude con las velitas... llegó el pastel con 24 velitas re utilizadas del pastel de Juan, que celebro su aniversario el dia 19, joyeux anniversarie... cantaban...

Virginie: Allez-soufflez!!
Yo, inhalo y soplo.... río, no pude apagarlas, vuelvo a inhalar y soplar, esta vez mas fuerte y con cierto temor a mezclar el aire con saliva de mi boca. No lo logré, risas, y un: no mames ya ni soplas. Se acabo cada intento por apagar las velas era inútil, un momento antes de exhalar una risa tomaba por asalto al soplido, reduciendolo al minimo.

Conclusión, Améle tuvo que souffler, mientras yo hacia el cuarto o quinto intento. Fin de la historia. Lo demás, una fiesta cerca de Sant Germain de Près, chelas y así se acabó el 21 de octubre, donde lo di vuelta al contador.