El personaje se dirije al trabajo como cada día, sentado en el interior de un vagón del metro, lee algo sobre signos, significados y significantes, tema que solía apasionarlo. Al abrir las puertas del vagón una estampida interrumpe sus pensamientos. Mezclada con la masa aparece Ella, la mujer que conoció hace algunos meses y que las últimas dos semanas se ha negado a responder en el teléfono.
La mira un instante y el personaje, tímido, se esconde tras las letras, le inunda una mezcla de coraje, enojo, inseguridad, temor y timidéz. Se pierde entre letras y palabras inintelegibles, el corazón se acelera y de apoco voltea sigilosamente sobre su hombro izquierdo verificando que se trata de la misma mujer, la que le ha quitado el sueño los últimos quince días.
La mujer desciende del vagón, el personaje sale de su escondite literario y se pregunta si la volverá a ver.
Do you belive in what you see?
La mira un instante y el personaje, tímido, se esconde tras las letras, le inunda una mezcla de coraje, enojo, inseguridad, temor y timidéz. Se pierde entre letras y palabras inintelegibles, el corazón se acelera y de apoco voltea sigilosamente sobre su hombro izquierdo verificando que se trata de la misma mujer, la que le ha quitado el sueño los últimos quince días.
La mujer desciende del vagón, el personaje sale de su escondite literario y se pregunta si la volverá a ver.
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